Tipo: Derogación
ARTÍCULO 360.- Derógase el inciso d) del artículo 1002 del Código Civil y Comercial aprobado por la Ley N° 26.994.
El artículo 360 de la Ley "Ómnibus" deroga el inciso d) del artículo 1002 del Código Civil y Comercial. Este inciso establecía que los daños y perjuicios causados por animales o cosas inanimadas son responsabilidad de su dueño o guardián, salvo que estos prueben que la causa del daño fue ajena a su voluntad.
La derogación de este inciso significa que ya no se podrá responsabilizar al dueño o guardián de un animal o cosa inanimada por los daños y perjuicios causados por estos, a menos que se pueda demostrar que el daño fue causado por su culpa o negligencia.
La derogación de este inciso significa que ya no se podrá responsabilizar al dueño o guardián de un animal o cosa inanimada por los daños y perjuicios causados por estos, a menos que se pueda demostrar que el daño fue causado por su culpa o negligencia.
¿Qué significa?
El artículo 1002 del Código Civil y Comercial establece que "el dueño o guardián de un animal o cosa inanimada es responsable por los daños y perjuicios causados por ellos, salvo que pruebe que la causa del daño fue ajena a su voluntad".
El inciso d) de este artículo establecía una excepción a esta regla general, al disponer que "no se responde por los daños causados por animales o cosas inanimadas si estos son causados por fuerza mayor o caso fortuito".
La derogación de este inciso significa que ya no se podrá invocar la fuerza mayor o el caso fortuito como defensa en caso de daños y perjuicios causados por animales o cosas inanimadas. Esto significa que el dueño o guardián de estos será responsable por los daños causados, incluso si estos fueron causados por un evento imprevisible e inevitable.
El inciso d) de este artículo establecía una excepción a esta regla general, al disponer que "no se responde por los daños causados por animales o cosas inanimadas si estos son causados por fuerza mayor o caso fortuito".
La derogación de este inciso significa que ya no se podrá invocar la fuerza mayor o el caso fortuito como defensa en caso de daños y perjuicios causados por animales o cosas inanimadas. Esto significa que el dueño o guardián de estos será responsable por los daños causados, incluso si estos fueron causados por un evento imprevisible e inevitable.
Ejemplos
Para ilustrar el alcance de esta derogación, podemos imaginar el siguiente ejemplo:
- Si un perro muerde a una persona, el dueño del perro será responsable por los daños y perjuicios causados a la víctima, incluso si el perro mordió a la persona porque fue atacado por otro perro.
- Si un árbol cae sobre un coche, el dueño del árbol será responsable por los daños y perjuicios causados al coche, incluso si el árbol cayó debido a una tormenta.
a. Consecuencias Positivas:
La derogación del inciso d) del artículo 1002 del Código Civil y Comercial tiene varias consecuencias positivas, entre ellas:
- Mayor protección para las víctimas de daños y perjuicios: Al eliminar la defensa de la fuerza mayor y el caso fortuito, se hace más fácil para las víctimas de daños y perjuicios obtener una compensación por sus pérdidas. Esto es especialmente importante en casos donde el daño fue causado por un animal o una cosa inanimada que estaba bajo el control del dueño o guardián.
- Desincentiva la negligencia: Al hacer a los dueños y guardianes de animales y cosas inanimadas responsables por los daños causados por estos, se les incentiva a tomar medidas para prevenir estos daños. Por ejemplo, los dueños de perros pueden tomar medidas para asegurarse de que sus perros no muerdan a nadie, y los propietarios de árboles pueden tomar medidas para asegurarse de que sus árboles estén sanos y no representen un peligro para las personas o los bienes.
- Claridad y simplicidad en la legislación: La derogación de este inciso simplifica la legislación sobre responsabilidad civil por daños y perjuicios causados por animales o cosas inanimadas, al eliminar una excepción a la regla general de responsabilidad. Esto hace que sea más fácil para los jueces y abogados aplicar la ley y para los ciudadanos entender sus derechos y obligaciones.
b. Consecuencias Negativas:
Sin embargo, la derogación del inciso d) del artículo 1002 del Código Civil y Comercial también tiene algunas consecuencias negativas, entre ellas:
- Posible aumento de las primas de seguros: Al aumentar la responsabilidad de los dueños y guardianes de animales y cosas inanimadas, es posible que las compañías de seguros aumenten las primas de seguros para estos individuos. Esto podría hacer que sea más difícil para las personas obtener un seguro asequible.
- Desincentivo a la tenencia de animales: Al hacer a los dueños de animales responsables por los daños causados por estos, algunas personas podrían sentirse disuadidas de tener animales, lo que podría tener un impacto negativo en el bienestar de los animales.
- Posibles injusticias: En algunos casos, la derogación de este inciso podría conducir a injusticias, ya que podría responsabilizar a los dueños y guardianes de animales o cosas inanimadas por daños causados por estos que no fueron causados por su culpa o negligencia.
- Si un perro muerde a una persona, el dueño del perro será responsable por los daños y perjuicios causados a la víctima, incluso si el perro mordió a la persona porque fue atacado por otro perro.
- Si un árbol cae sobre un coche, el dueño del árbol será responsable por los daños y perjuicios causados al coche, incluso si el árbol cayó debido a una tormenta.
a. Consecuencias Positivas:
La derogación del inciso d) del artículo 1002 del Código Civil y Comercial tiene varias consecuencias positivas, entre ellas:
- Mayor protección para las víctimas de daños y perjuicios: Al eliminar la defensa de la fuerza mayor y el caso fortuito, se hace más fácil para las víctimas de daños y perjuicios obtener una compensación por sus pérdidas. Esto es especialmente importante en casos donde el daño fue causado por un animal o una cosa inanimada que estaba bajo el control del dueño o guardián.
- Desincentiva la negligencia: Al hacer a los dueños y guardianes de animales y cosas inanimadas responsables por los daños causados por estos, se les incentiva a tomar medidas para prevenir estos daños. Por ejemplo, los dueños de perros pueden tomar medidas para asegurarse de que sus perros no muerdan a nadie, y los propietarios de árboles pueden tomar medidas para asegurarse de que sus árboles estén sanos y no representen un peligro para las personas o los bienes.
- Claridad y simplicidad en la legislación: La derogación de este inciso simplifica la legislación sobre responsabilidad civil por daños y perjuicios causados por animales o cosas inanimadas, al eliminar una excepción a la regla general de responsabilidad. Esto hace que sea más fácil para los jueces y abogados aplicar la ley y para los ciudadanos entender sus derechos y obligaciones.
b. Consecuencias Negativas:
Sin embargo, la derogación del inciso d) del artículo 1002 del Código Civil y Comercial también tiene algunas consecuencias negativas, entre ellas:
- Posible aumento de las primas de seguros: Al aumentar la responsabilidad de los dueños y guardianes de animales y cosas inanimadas, es posible que las compañías de seguros aumenten las primas de seguros para estos individuos. Esto podría hacer que sea más difícil para las personas obtener un seguro asequible.
- Desincentivo a la tenencia de animales: Al hacer a los dueños de animales responsables por los daños causados por estos, algunas personas podrían sentirse disuadidas de tener animales, lo que podría tener un impacto negativo en el bienestar de los animales.
- Posibles injusticias: En algunos casos, la derogación de este inciso podría conducir a injusticias, ya que podría responsabilizar a los dueños y guardianes de animales o cosas inanimadas por daños causados por estos que no fueron causados por su culpa o negligencia.
¿Cuáles son las consecuencias?
La eliminación de este inciso significa que la demanda judicial, el acto de conciliación y el reconocimiento de la deuda ya no interrumpirán la prescripción de las acciones personales. Esto podría tener consecuencias negativas para los acreedores, ya que podrían perder el derecho a reclamar el pago de una deuda si no la reclaman en el plazo de prescripción establecido por la ley.
Información adicional:
No se dispone de información adicional.