La derogación de la Ley Nacional del Teatro tiene varias consecuencias: Elimina el Instituto Nacional del Teatro (INT), lo que significa que ya no habrá un organismo público encargado de promover y desarrollar el teatro en Argentina. Deja sin efecto los programas y proyectos que el INT llevaba a cabo, como el apoyo a la producción y difusión de obras teatrales, la formación de actores y directores, y la promoción del teatro en las escuelas. Puede generar incertidumbre y preocupación entre los trabajadores del teatro, que podrían verse afectados por la falta de apoyo institucional. Información adicional: La Ley Nacional del Teatro fue sancionada en 1997 y reglamentada en 1998. El INT se creó con el objetivo de promover y desarrollar el teatro en todo el país, apoyar la producción y difusión de obras teatrales, formar actores y directores, y promover el teatro en las escuelas. La derogación de la Ley Nacional del Teatro ha generado polémica en el sector teatral argentino. Algunos sectores consideran que la ley era necesaria para apoyar y desarrollar el teatro en el país, mientras que otros creen que era una burocracia innecesaria que obstaculizaba el desarrollo del teatro independiente.